23/04/2025

Carta a seres de otros mundos

Entrada rescatada del blog original, publicada inicialmente en 2012.


Muy señor@s extraterrestres mios;

Muy probablemente hayan recibido en los últimos tiempos, de unos ciento y pocos años para acá, propaganda que habla de las bondades de nuestro planeta Sol-3, más conocido por los locales como Tierra o cariñosamente Planeta Azul debido a los destellos que produce nuestra atmósfera al entrar en contacto con la luz solar. Seguramente se hayan sentido tentados de establecer su residencia aquí, tanto si son ustedes invasores como exiliados en busca de asilo diplomático, tras recibir las emisiones procedentes de nuestro planeta, del que de paso debo puntualizar que: a) Estados Unidos no es toda la Tierra y b) Las proyecciones audiovisuales sobre seres como ustedes machacando la población terrestre son ficción y no son reales. Aunque las armas de destrucción masiva de que disponemos para hacerles frente, si.

Y es que, señor@es, probablemente hayan sido ustedes víctimas de un engaño propiciado por nuestros políticos y otros magnates adinerados, que acaparan toda la atención de los medios de comunicación que frecuentemente traspasan la barrera de nuestros satélites, perdiéndose en la inmensidad del espacio. Entiendan que estos señores no representan a los aproximadamente 7.000 millones de habitantes que hay en la Tierra, puesto que apenas constituyen el 5% de la población o menos. Pero entiendo también que las voces del otro 95% no les hayan llegado contándoles el resto de información concerniente sobre nuestro planeta, de hecho no tengo muy claro que vayan a leer esto. Por favor, les pido que dejen a un lado los datos de falsos documentales que hayan podido llegar a sus ojos, antenas u oídos, como los boletines Star Trek. Desgraciadamente, son mucho más precisos otros documentales como The Day Earth Stood Still o 1984. Y olvídense de obras como Battlestar Galactica o Star Wars, que esto es lo que aquí llamamos ciencia-ficción y es empleado para el entretenimiento de las masas.

Les voy a poner un ejemplo. Habrán leído que nuestro planeta es aproximadamente un 80% agua, fuente de vida, y que tiene una atmósfera rica en oxígeno y nitrógeno, con una capa de ozono protectora contra rayos ultravioletas procedentes del sol. Lo que no sabrán es que debido a la "contaminación", el "efecto invernadero" y el "cambio climático" de ese 80% un porcentaje muy pequeño se puede beber, reduciéndose a velocidad alarmante con el paso de los años. Igualmente, la capa de ozono tiene unos agujeros del tamaño de Europa, y si bien es cierto que se ha regenerado levemente en los últimos tiempos, peligra su existencia gracias a la no ratificación del tratado de Kyoto, y la tendencia general de ese 5% adinerado por usar productos "biodegradables", es decir: Productos que son complicados de reciclar en favor de otros que se pueden reutilizar directamente como se hacía antaño: Papel, vidrio, etc.

Lo mismo sucede con nuestra flora y fauna. Existen unos 3500 millones de especies animales, y de cuando en cuando se descubre alguna nueva. Lo que no les dicen es que cada 5 segundos de promedio se extingue una especie, más o menos el mismo tiempo en que nace un nuevo imbécil. Nuestra flora es uno de nuestros mayores tesoros al igual que la diversidad geográfica, que hacen que se pueda clasificar según los términos que usamos nosotros para clasificar sus planetas, como un Planeta Jardín o Clase M. Pero desastres provocados como la temible "Recalificación de Terrenos" están acabando con las zonas naturales, proclives a convertirse en colmenas para seres humanos. Otro fenómeno igualmente desastroso conocido como "Dominguero", tiende a deforestar los bosques en nuestros veranos más cálidos por una acusada falta de civismo y sentido común, el menos común de los sentidos.

Que decir del ser humano. Bueno, les digo una cosa: Ustedes no van a invadirnos. NOSOTROS LES VAMOS A INVADIR A USTEDES. Si algo sabemos hacer bien es la guerra. Destruir, invadir, esclavizar y agotar los recursos de un lugar, para luego pasar al siguiente como si tal cosa. ¿No me creen? Lean algo desde Gengis Khan a George W. Bush pasando por Adolf Hitler o Napoleón. Pero se lo voy a resumir ciñiéndome a la historia del pasado siglo, el número veinte, en el que casi mandamos el planeta al otro barrio en una gran guerra.

Dos veces.

A la tercera se lo pensaron un poquito mejor. Porque, ¿saben? El mayor ingenio del siglo veinte fue la bomba atómica. La bomba de hidrógeno, los misiles intercontinentales balísticos, las cabezas múltiples, las bombas arco-iris... Vamos que, con todo el desarme nuclear tras el fin de la Guerra Fría, aun nos queda material para destruir la Tierra y todo lo que habita en ella siete veces. ¿Entienden por que digo que ustedes no van a invadirnos? Si podemos destruirnos a nosotros mismos siete veces cuando con una bastaría, ¿que creen que le va a pasar a su flotilla invasora? Les sale más rentable encontrar siete planetas que colonizar pacíficamente, ¿no creen?

Y me dirán que a pesar de todo tenemos ese sentimiento maravilloso que nosotros llamamos "Libertad". No, no es una estatua. No, no es una bandera de barras y estrellas. Déjenme decirles lo que significa la Libertad y los Derechos Humanos. Actualmente millones de personas viven en condiciones infrahumanas, trabajando casi todo el día por sueldos míseros que apenas les dan para comer, fabricando productos de alta tecnología como el ordenador desde el que les escribo esto. Producen a precios irrisorios, para que luego unos señores llamados "empresarios" se lo vendan al "público" a diez veces más su valor. Y de cuando en cuando, cuando uno de estos esclavistas muere, tentados quedan los medios de beatificarlo. Y sino, estas gentes viven a merced de los cárteles, las mafias, las drogas...

Incluso entre aquellos que aparentemente vivimos mejor, debo decirles que las cosas no van bien. Las condiciones de vida del ciudadano medio han caído en picado desde hace treinta años, el trabajo cada vez está peor, y las perspectivas de futuro son cuanto menos, cortas. Como el sueño de una noche de verano. Y no crean que lo aceptamos sin más, que como les he dicho, somos muy guerreros. Por desgracia, cuando intentamos denunciar esta degradación, lo primero que intenta suprimirse para evitar las revoluciones es la "Libertad de Expresión". Luego el "Derecho a Reunión" mediante una herramienta llamada "Antidisturbios", y finalmente el "Derecho a Educación" mediante la reducción de recursos destinados a enseñar a las generaciones del mañana. No saben ustedes la inmensa cantidad de niños que mueren en Africa todos los días a causa del hambre y enfermedades varias debido a la condición más extrema de la vida humana, en la que magnates sin piedad especulan incluso con el valor de productos de primera necesidad para la supervivencia. Inmigrantes intergalácticos como ustedes son susceptibles de caer en esta clase social y ser explotados hasta morir.

Vean que el planeta Tierra no es blanco ni negro, es un amplio espectro de grises. Y si después de tener la información completa es decir: La parte bonita que los políticos venden y la parte sucia que los ciudadanos padecen, deciden aun así venir para quedarse, solo puedo decirles una cosa:

Chavales, no sabéis donde os estáis metiendo.

Soñando desde la década de los sesenta con que en el futuro las cosas vayan mejor, casi nos hemos terminado de creer que podemos hacer grandes cosas, y es cierto. El problema es que si no hay un interés vil por medio, no se hacen. Así que, cuando lleguen al control de aduanas en la Luna y lean nuestro cartel de bienvenida...

Aquí, unos hombres procedentes del planeta Tierra, pisaron por primera vez la Luna en julio de 1969 d.C. Vinimos en son de paz, en nombre de toda la humanidad.

...Sepan que en aquel momento estábamos envueltos en esa guerra de la que les hablé antes, esa en la que podríamos habernos aniquilado siete veces. De paz nada, y menos aun "en nombre de toda la humanidad". Más bien "En nombre de la carrera espacial que Estados Unidos acaba de ganar".

No piensen que no tenemos nada bueno. Solo quiero hacerles ver la otra cara de la moneda, que tengan la máxima información posible de ambos lados. También tenemos nuestras cosas buenas: Las pipas de girasol, la coca-cola, los juegos de rol...

Les recomendaría un lugar mejor para vivir, pero por desgracia aun no hemos podido ir más allá de nuestro único satélite natural: Aun no hemos descubierto el motor de curvatura o los secretos de la Melange. Aunque si deciden darse una vueltecita y sus pretensiones son amistosas, yo estaré encantado de recibirles.

Larga Vida y Prosperidad

02/04/2025

La caza del Octubre Rojo, novela de Tom Clancy

La caza del Octubre Rojo es considerada la novela mas famosa de Tom Clancy. Fue todo un bestseller en su momento, llegando a ser adaptada para cine por John McTiernan y resultando un peliculón.

Hace unos meses se me metió en la cabeza volver a releer esta novela, la cual fue uno de los primeros libros electrónicos que leí en un experimento por ver si en una PDA de principios de los 2000 se podía hacer esto sin dejarse los ojos. (Y no, no se puede).

Aun así la novela me resultó interesante, lo que hizo que con el paso del tiempo acabase leyéndome unas cuantas mas de este señor incluída toda la saga de Jack Ryan. Pero no me volví a leer La Caza del Octubre Rojo, hasta el punto de haberla olvidado completamente. En mi memoria sólo quedaba la película, (que es bastante diferente del libro). Así que decidí hacerme con el libro (esta vez en papel) y ponerme a leer.

El resultado no ha sido como esperaba. La novela ha dejado en mi una serie de incómodas preguntas: ¿Estaba bien digitalizado el libro cuando lo leí la primera vez o lo habían recortado? ¿O tal vez leí una edición abreviada? ¿Por qué mi memoria lo borró completamente si técnicamente me había gustado? Y finalmente, ¿por qué los traductores le tienen manía a Tom Clancy?

Estructura del libro

Como reza en la contraportada, la novela va de como en los años 80 un submarino ruso lanzamisiles llamado Octubre Rojo se abalanza sobre las costas de los Estados Unidos de América con unas intenciones nada claras. En un intento por detenerlo la armada soviética y la americana se lanzan a la mar. Y por en medio pasan cositas.

Dicho esto, vamos con el libro. Primero de todo, agradezco enormemente que en la contraportada no me destripen la trama del mismo. Yo no se que pasa con la gente hoy en día, pero es muy habitual que en la contraportada o en la sinopsis de la tienda online te cuenten todo lo que va a pasar sin miramientos. Y no sólo en libros: Con las películas pasa igual, que casi tienes que taparte los ojos cuando vas a ponerla en la plataforma; ni que fuesen los Mitos...

La historia de La caza del Octubre Rojo empieza bien. Clancy va hilando poco a poco un thriller de espionaje presentando a todos los actores importantes, aunque también hay que decir que a unos los presenta con mas detalle que a otros. Pero a medida que avanza la historia, se estanca. Pasan cosas, sí. Pero la trama no avanza.

Y de repente, cuando llegas al último cuarto del libro, te encuentras de golpe con el supuesto desenlace... que luego descubres que no es tal sino que es el climax de la novela, porque aun falta el girito final del desenlace real, que va a ocupar esas mas de 100 páginas que faltan para terminar.

Y es que lo que debería haber sido el climax son en realidad un montón de páginas de relleno sobre operaciones navales que no van a ningún sitio. Eso por no mencionar al antagonista principal, que se menciona de pasada en los mismísimos comienzos para luego olvidarse por completo de él hasta el final, cuando ya no te acuerdas ni de quien era.

Detalles, ¿Detalles?

Que Tom Clancy era un friki de la guerra naval no es ningún secreto. La caza del Octubre Rojo se vendió desde el principio como un thriller centrado en el peligroso "juego" que los sumbarinos de ataque y lanzamisiles de EE. UU. y la URSS libraban en las aguas del Atlántico Norte desde los comienzos de la Guerra Fría.

Pero no hay mucho de esto en la novela. Hay momentos en que el Octubre Rojo es un mero mcguffin para explicar todo el tragín político que va ocurriendo a su alrededor. Y las pocas operaciones aeronavales que hay giran en torno a aviones que no son precisamente de caza submarina.

Toda historia se desarrolla en su propio "mundo", con su propia lógica y coherencia interna. Este mundo debe ser explicado de una forma u otra a lo largo de la misma. En el argot se le conoce como "worldbuilding" o construcción de mundo.

Clancy se esmera mucho en presentarnos como es este mundo en el que se desarrolla su novela: Un mundo que podría describirse como el nuestro real, en el que simplemente se desarrolla una historia ficticia. Pone mucho empeño en explicar como funciona todo el embrollo de los submarinos, el espionaje, la política... Hay un momento en que incluso describe con todo lujo de detalles como el reactor de un submarino se va a la porra por no haber hecho el mantenimiento preventivo correspondiente.

Estos detalles tan exhaustivos son parte del sello personal de Tom Clancy. Mucha gente lee a este señor precisamente por esto y la verdad es que no hay nada de malo en ello cuando está bien hecho.

En mi caso, para mi es importante que exista un buen nivel de detalle en la construcción del mundo, porque da sentido a todo lo demás. Pero suelo estar bastante en contra de estos "trances" donde al autor se le va la olla y se queda ensimismado hablando de lo mucho que sabe sobre un tema concreto. En ciencia-ficción dura es muy habitual.

Puedo llegar a aceptar esto si toda la novela está llena de ese tipo de detalles por igual. Sin embargo, en La caza del Octubre Rojo hay momentos donde Clancy se enrolla en temas de los que no sabe o no tiene información suficiente como para explayarse; inventándose las cosas y haciéndolas pasar por verídicas.

Un ejemplo de esto es la fumada bestial que se pega en un capítulo donde unos aviones A-10A Thunderbolt II, que en la vida real están ultra-especializados en cazar tanques, son enviados a hacer un asalto aeronaval. Describe los aviones con todo lujo de detalles inventados que no tienen nada que ver con la realidad y encima comenta que los pilotos son reservistas con apenas entrenamiento en él. Con dos cojones.

¿Qué necesidad tenía de hacer esto? Podría haber planteado la escena con cualquier otro avión mas apto para ello. Es que de todo lo que podría haber elegido se fue a la que quizás fuese la peor opción... Y no da absolutamente ninguna razón válida para ello. De hecho, el aporte que hace a la trama es insignificante y queda reducido a un párrafo al final del libro.

Conclusiones

Cuando empecé a releer la novela, estuve varios días enganchadísimo. Me encantan los thrillers de espionaje y también soy muy friki del tema de submarinos y demás. Pero a medida que fuí avanzando, todo se fue enfriando hasta el punto de estar completamente perdido sin saber que estaba pasando. Para cuando llegó el desenlace me había aburrido tanto con el relleno y las incoherencias que no me volvió a enganchar, terminando la novela sin ganas y haciendo bastantes lecturas en diagonal.

Y he preferido dejar de lado el tema de la traducción: Casi todas las novelas de Tom Clancy las he acabado leyendo en inglés porque las traducciones tenían momentos de reir por no llorar. Pero esta vez la leí en español y en fin... Creo que cada vez que coma palomitas de maiz me acordaré de este libro, no digo mas.

No se si volveré a releer la novela algún día, pero una cosa tengo clara: Y es que para mi la mejor obra de Tom Clancy no es esta, sino Tormenta Roja (Red Storm Rising), de la que también hablaré algún día de estos...